¡Buenos días! Comenzamos el fin de semana y como todos los viernes hoy os traemos una nueva receta, cuyo ingrediente base es el arroz. Por esto, vamos a ver qué es el arroz y cuáles son sus propiedades.
El arroz, se puede decir que es, tras el trigo, el cereal más consumido en todo el mundo y es la base de la alimentación en gran parte del mundo oriental.
Del arroz se conocen muchos tipos y variantes, la mayoría derivan del arroz asiático llamado Oriza Sativa del cual podemos encontrar dos variedades según si el grano es corto o largo (variedad japónica y variedad índica), pero existe otro tipo de origen africano denominado Oriza glaberrima.
Existen muchas variedades pero en cuanto a su composición las diferencias son muy pequeñas, diferenciándose mayoritariamente en la concentración en almidón, lo que condiciona después el cocinado.
En general el arroz es una fuente importante de energía gracias a su alto contenido en hidratos de carbono y almidón, el almidón ayuda a ralentizar la digestión y controlar el paso de azúcares a la sangre fundamental para aquellos que son diabéticos.
Posee una pequeña parte proteica de origen vegetal, no contiene apenas grasas ni colesterol y es una fuente rica en vitaminas y minerales indispensables para nuestro organismo, vitaminas sobre todo del grupo B (B1, B2 y B6), ácido fólico y vitamina E; y en cuanto a minerales contiene una pequeña parte de sodio, calcio, y, en una mayor cantidad encontramos fósforo, magnesio y potasio. Este último tiene la capacidad de eliminar líquidos, por lo que es muy beneficioso en personas que los retienen, también es útil en la prevención de la hipertensión ya que al eliminar agua la presión arterial se reduce. Además, interviene en procesos renales evitando que el riñón trabaje en exceso.
El arroz también posee un alto contenido en fibra, que como ya sabéis es un prebiótico fundamental para la flora bacteriana del intestino, por lo que evita el estreñimiento.
Otras propiedades que tiene es que ayuda a controlar los niveles de colesterol, la diabetes y es un cereal que no contiene gluten por lo que es un alimento recomendable en intolerancias al gluten.
El agua de arroz, tiene la propiedad de evitar la deshidratación en diarreas además de ayudar a prevenirlas.
Todas estas propiedades se corresponden con el arroz integral, el arroz blanco es sometido a un proceso de descascarillado y, en ocasiones, pulido lo que produce una disminución importante en su composición nutricional.
Existen variedades de arroz menos conocidas como el arroz rojo, que requiere tiempos de cocción más largos y cada vez se habla más del arroz dorado, un arroz modificado genéticamente al que se le ha aumentado su contenido en β-caroteno dándole ese color característico, esta modificación se hizo para dotar al arroz de una mayor concentración de este precursor de la vitamina A, muy necesario en niños con desnutrición sobretodo en el tercer mundo.
Y ahora vamos a la receta. ¿Tenéis arroz blanco de sobra y no sabéis que hacer con él? ¿Os apetece un arroz diferente para acompañar un plato? ¡Pues estáis de enhorabuena! La receta de hoy os trae justamente eso. Hoy cocinamos Arroz con nueces, jamón cocido y especias
Ingredientes 1 persona
- 100 gr. de arroz
- Unos 25 gr. de cebolla (menos de la mitad de una cebolla mediana-pequeña)
- Un puñadito de nueces mondadas (aprox. 15 gr.)
- Una loncha de jamón cocido (unos 20 gr.)
- Tomillo y perejil al gusto
- Salsa de soja (un chorrito)
- Aceite (una cucharada sopera que serán unos 5 mL)
Preparación
En una sartén con un chorrito de aceite sofreímos la cebolla cortada finita. Cuidado que no se os queme. Cuando este transparente echamos el jamón cocido troceado para saltearlo un poco.
Después, incorporamos las nueces un poco picadas o al menos con un tamaño no muy grande. Hay que darles sólo un golpe de calor porque si no se nos amargan; seguidamente echamos el arroz.
Removemos para mezclar todos los ingredientes y finalizamos el plato espolvoreando con las especias y con un chorrito de salsa de soja para darle un poco más de sabor al arroz.
¡Para chuparse los dedos!
Servir acompañando al pescado o la carne. Otra variante que no he intentado y para que no sea un plato de acompañamiento sino que fuera un plato principal, sería en lugar de jamón york utilizar pollo.
Como veis es una receta muy sencillita que no requiere apenas tiempo. Si no tenéis arroz de sobra, no pasa nada, sólo os tomará un poquito más de tiempo el plato. Lo único que tenéis que hacer es hervir el arroz en una olla con agua, sal y limón (para que no se pegue) durante el tiempo que os digan las instrucciones del paquete del arroz y luego escurrirlo y lavarlo con un poco de agua. Cuando esté totalmente escurrido ya se puede echar a la sartén. El arroz debe estar bien escurrido para que, cuando lo echéis a la sartén, no salpique y os queme.
Esto es todo, amigos. Hasta la próxima semana.
Realizado por Tamara Valencia Dueñas y Cristina Vallespín Escalada
Pues mira tu que tengo un poquito d arroz que me sobro ayer, ya se como lo voy a preparar, ja, ja.
ResponderEliminarBsoss al equipo
Esperamos que te salga bien rico María. Ya nos contarás que te ha parecido. Besos también para ti de parte de todo el equipo :)
EliminarHola chicos. He leído la receta, me parece estupenda y creo que la voy hacer mañana! Tiene una pinta deliciosa.
ResponderEliminarCon respecto al arroz blanco, siempre he escuchado que se suele tomar para problemas de estómago (entre ellos la diarrea)y vosotros decís que evita el estreñimiento. Me gustaría que me aclarárais esta contradicción.
Seguir así, vuestro blog es super interesante!
Besos
EEB
Nos alegra que te haya gustado, ya nos contarás tus impresiones.
EliminarSi, en ese caso nos referimos al arroz integral, evita el estreñimiento por una sencilla razón hace las funciones de prebiótico gracias a su alto contenido en fibra, esto favorece el mantenimiento de una buena flora bacteriana, mejorando la absorción así como el tránsito intestinal.
El arroz en definitiva ayuda en los problemas de absorción entre los que se encuentra la diarrea y el estreñimiento, mucho de estos problemas derivan de una flora bacteriana deficitaria, mantener en buenas condiciones dicha flora podría evitarnos muchos de los problemas citados entre otros muchos.
Esperamos haber resuelto tu duda.