¡Buenos días! Ya ha pasado otra semana más y estamos a viernes. Y por ello al blog llega una nueva y saludable receta, pero antes aprenderemos un poco de las propiedades la avena.
La avena (Avena sativa) es un cereal conocido desde la antigüedad. Se cree que tiene su origen en Europa occidental y puede que su aparición se encuentre entre las malas hierbas de la cebada y que por ello se extendió en conjunción con ésta. Los griegos comenzaron a llamarla “aveo” que significa deseo. Se sabe que pociones a base de avena verde eran recomendadas para aligerar las afectaciones del sistema nervioso central.
Además, la avena fue la base de la alimentación de pueblos reconocidos por su vigorosidad como los hunos, el pueblo de Atila, los irlandeses y los escoceses, célebres por su fuerza física. En la medicina de los antiguos chinos conocían y utilizaban ya el efecto estimulante de la avena.
A nivel nutricional, encontramos hidratos de carbono, de absorción lenta, por lo que nos produce una sensación de saciedad durante más tiempo; sin olvidarnos de la fibra, ya que contiene un 10,6%, se caracteriza por su contenido en betaglucanos, que es un tipo de fibra soluble, característica por su viscosidad y su capacidad de formación de geles en el estómago, responsables en gran parte de sus beneficios. Ya que mediante la formación de estas estructuras, el betaglucano reduce la absorción de colesterol y equilibra los niveles de glucosa en sangre, beneficio importante para las personas diabéticas. Y, tiene un papel fundamental en la prevención de ciertos tipos de cáncer. Además, la fibra soluble contribuye a un adecuado equilibrio en la flora del colon.
La avena se puede considerar un alimento integral porque el salvado y el germen están unidos al grano. Es por ello, una rica fuente de proteínas, ya que contiene 6 de los 8 aminoácidos esenciales.
No nos podemos olvidar del aporte graso, siendo este cereal el más rico en grasas. Predominan las grasas poliinsaturadas como el ácido linoleico, con importantes beneficios sobre el sistema circulatorio e inmunológico, pero la avena destaca por su contenido en ácido oleico. También, gracias a la presencia de componentes grasos como el avenasterol y fitoesterol disminuyen la absorción intestinal de colesterol, propiedad que hace que la avena sea un alimento indicado para aquellas personas que padezcan de hipercolesterolemia.
En cuanto a su contenido vitamínico, la avena posee vitaminas del grupo B, como el ácido fólico, y vitamina E. Con respecto al contenido mineral, posee mayor cantidad de calcio, hierro y zinc que el resto de cereales.
Y ahora, con motivo del día mundial de la diabetes os traemos un desayuno saludable, apto para personas diabéticas, y muy completo si se le añade una fruta, entremos a la cocina a preparar un rico Porridge o gachas de avena
Ingredientes
- 30 gr de copos de avena
- 2 tazas de bebida de arroz
- 1 ramita de canela
- La piel de ½ limón
En un cazo ponemos a calentar la bebida de arroz con la canela y el limón.
Cuando comience a hervir, le agregamos los copos de avena y removemos, hasta que espese y se ponga cremosa (aproximadamente unos 15 minutos).
Una vez formado el puré, está listo para comer, sólo queda espolvorear con canela en polvo por encima en el momento de servir.
Si somos golosos y nos parece poco dulce, opcionalmente, se podrían echar unas gotas de estevia o edulcorantes en el caso de las personas diabéticas, e incluso azúcar moreno para no diabéticos.
Pasad un feliz fin de semana y nos vemos el lunes con un nuevo post. ¡Ser felices!
Realizado por Jorge Ibarra Morato y Tamara Valencia Dueñas
Fuentes
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